Para mantener una óptima salud debemos tener un pH equilibrado, el ambiente interno de nuestro cuerpo posee un pH (medida de acidez o alcalinidad) de cerca de 7.0, por lo tanto, es un medio alcalino.
La falta de energía, la pérdida del ánimo o del gozo de vivir, forman parte de evidencias que hablan de que tu pH está desequilibrado o no. Muchas veces mantienes un dolor de cabeza, tu cara está muy pálida y tus ojos lacrimosos; en otras ocasiones tus dientes están sumamente sensibles y tus encías inflamadas; tu estómago constantemente está llamándote la atención, ya sea por la acidez o por dolor, quizá tengas desarreglos intestinales liberadores de ácidos, con tenencia diarreica o tu orina es ácida; o te ha ocurrido que tus uñas se tornan delgadas o tus cabellos pierden su brillo, te han dolido o crepitado tus articulaciones ó padeces de neuralgia, insomnio ó neuritis y esto se debe
La intención no es alarmarte, si no que te informes y puedas modificar tu actuar diario disciplinándote en el sueño, en el ejercicio, en el trabajo, en la alimentación, en tus relaciones personales.
Se dice que nuestro cuerpo es alcalino por diseño pero ácido por función, ya que casi cada proceso de nuestro cuerpo produce acidez; pero nuestro cuerpo necesita, en general, mantener un pH levemente alcalino, cuando se pierde este equlibrio y el pH desciende, nuestro cuerpo se torna ácido y experimentamos falta de energía, cansancio, sobrepeso o falta de peso, mala digestión, artritis, molestias y dolores, desequilibrios en la tensión arterial, problemas con el nivel de azúcar en la sangre, problemas digestivos, problemas con hongos (por ejemplo, cándida), dolores de cabeza, ardores, inflamación de articulaciones, insomnio, envejecimiento prematuro o problemas de piel, e incluso cáncer.
El pH es simplemente la medida que se da entre acidez y alcalinidad. El “p” significa poder o potencial. El “H” es el símbolo para el elemento Hidrógeno. El término pH significa “Potencial de Hidrógeno”.
La escala pH va desde 0 a 14. pH 7 significa que existe equilibrio entre acidez y alcalinidad y se considera neutro. Esta escala pH es logarítmica, lo que significa que los valores que separan cada unidad aumentan en proporción de su distancia del punto neutro de 7. Por ejemplo, un pH de 6 es diez veces más ácido que 7, pero un pH de 5 es cien veces más ácido que 7 y un pH de 4 es mil veces más ácido que 7. Por el otro lado, un pH de 8 es diez veces más alcalino que 7, un pH de 9 cien veces más alcalino que 7 y un pH de 10 mil veces más alcalino que 7.
Nuestro cuerpo se vuelve demasiado ácido cuando: ingerimos ácidos, creamos ácidos o tenemos una insuficiente neutralización e eliminación de ácidos.
Alimentos acidificantes como carbohidratos refinados, por ejemplo azúcar y harina refinada, la carne, los lácteos, el café, el alcohol, el tabaco bajan el pH de tu cuerpo. Un excesivo consumo de estos alimentos puede sobrecargar la capacidad de tu cuerpo para neutralizarlos.
Para mantener la salud nuestro organismo hace todo lo posible de modo constante para eliminar el exceso de ácidos que irrita tus tejidos y los despoja de minerales. Existe una fuerte relación entre el pH del ambiente interno de tu cuerpo y el pH de tu orina y saliva.
Uno de los sistemas principales que el cuerpo emplea para eliminar ácidos son los riñones. El nivel normal de eliminación de ácidos a través de los riñones da a la orina un pH de entre 6,75 y 7,25. Cuando medimos el pH de nuestra orina podemos determinar si el cuerpo elimina una cantidad normal de ácidos. Si la cantidad de ácidos eliminados es más alta de lo normal, el pH de tu orina será más ácido. Este pH bajo de la orina también indica que están bajas tus reservas de minerales alcalinos que se emplean para neutralizar los ácidos que se eliminan en la orina.
Otra indicación del equilibrio pH del cuerpo es el pH de la saliva. Cuando el cuerpo tiene una abundancia de neutralizantes minerales, el pH de tu saliva será entre 7,0 y 7,5 (y tan alto como 8,0 inmediatamente después de una comida.) Una lectura baja de pH de la saliva también indica una reducción en minerales alcalinos.
La realización de varias lecturas en diferentes momentos del día, tanto de la orina como de la saliva nos permitirá conseguir una indicación de si hay exceso de acidez o no en tu cuerpo.
La primera orina de la mañana tendrá el pH más ácido del día pero no debería encontrarse por debajo de 6,75. La segunda lectura debería subir a 7,0. Por otro lado, el fluido extracelular de nuestro cuerpo se vuelve lo más alcalino sobre las 2:00 de la tarde. Esto es porque los ácidos aún no se han acumulado y es cuando el cuerpo produce más material neutralizante.
Parece que cada “experto” tiene su propia opinión en cuanto a si conviene conocer el pH de la orina o de la saliva, a qué hora hacerlo y con qué frecuenta. También hay diferentes opiniones en cuanto al nivel perfecto de pH para la orina o saliva. Sin embargo, todos los expertos están de acuerdo en que la sangre necesita conservar un pH entre 7,35 y 7,40. Tu cuerpo hará todo lo posible para conservar el pH de la sangre en este rango tan estrecho, incluso si significa estresar otras partes del cuerpo. Por ejemplo robará calcio (un excelente mineral neutralizante) de los huesos o magnesio de tus músculos y otros tejidos para corregir una condición de acidez. Un constante bombardeo de factores acidificantes puede resultar en osteoporosis, cálculos renales, caries (entre muchos otros problemas).
La lectura pH de la primera orina de la mañana se considera como una lectura metabólica. Esta lectura siempre será la más ácida pero también indica la capacidad del cuerpo de metabolizar y neutralizar ácidos. Las lecturas del pH de la orina después de las comidas se consideran como lecturas reactivas, igual que cualquier lectura del pH de la saliva. Mientras que toda lectura de pH tiene importancia, una lectura del pH de tu orina te da mayor indicación del pH global que las lecturas del pH de tu saliva. Además es mejor hacer una lectura por la mañana que por la tarde.
Así que, mientras toda lectura de pH indica un estado de acidez o alcalinidad hasta cierto grado, algunas lecturas son más fiables y por tanto más importantes que otras. El Test de Lectura Múltiple de pH tiene en cuenta todas estas variables y te permite ver lo que representa el promedio de todas estas lecturas.
¿Cómo determinar la lectura múltiple del pH de tu cuerpo?
Una sola lectura no es capaz de proporcionarte esto. El test de lectura múltiple tiene en cuenta todas las variables presentes cuando lees tu pH, incluyendo el fluido testeado (orina o saliva) y la hora. Para conseguir una indicación del estado del pH en tu cuerpo, necesitarás realizar tres lecturas al días tanto de la orina como de la saliva – es decir seis lecturas al día durante dos días.
El test tiene en cuenta el hecho de que la lectura del pH de la orina es más importante que el de la saliva. También da mayor credibilidad a las lecturas de la mañana que a las de la tarde.
Ante diversas reacciones tales como el stress, las inflamaciones o el consumo de alimentos con alto contenido de grasa o acidez, el cuerpo intenta mantener el equilibrio, ajustar el ph y lograr que todos los mecanismos funcionen de manera óptima. Entonces, una dieta con base alcalina, sin duda, es beneficiosa para la salud, ya que intenta eliminar los alimentos procesados, las proteínas animales, el azúcar y la cafeína, a cambio de sumar minerales alcalinos como el sodio, potasio, magnesio y calcio.
La dieta alcalina se compone de aproximadamente de un 80% de alimentos alcalinos y un 20% de alimentos ácidos.
Cathy Wong, reconocida médica naturópata y naturista de la American College of Nutrition, enumera aquellos alimentos alta y moderadamente alcalinos (en orden decreciente):
* Verduras:
Pasto de trigo
Cebada
Alfalfa
Brócoli
Repollo
Pepino
Perejil
Palta
Rúcula
Remolacha
Apio
Escarola
Ajo
Jengibre
Judías verdes
Lechuga
Cebolla
Espinaca
Tomate
* Frutas:
Coco
Naranja
Limón
Lima
* Semillas y aceites:
Semillas de calabaza
Almendra
Aceite de borraja
Aceite de coco
Aceite de hígado de bacalao
Aceite de onagra
Aceite de pescado
Aceite de linaza
Aceite de oliva
Semillas de sésamo
- Entre los alimentos con mayor presencia de ácido encontramos:
Queso
Helado
Carne de res
Pollo
Pato
Huevos
Faisán
Cerdo
Mariscos
Setas
Papa
Maní
Pistacho
Mermelada
Mostaza
Salsa de soja
Vinagre
Azúcar
Miel
Levadura
En la dieta alcalina se debe dar un balance de 80% de alimentos alcalinos y un 20% de alimentos ácidos, la dieta consiste en reducir el consumo de productos ácidos, aumentar la cantidad de productos alcalinos y buscar el equilibrio en la alimentación.
El pH se puede medir con tiras para evaluar el pH, reactivos para piscinas, acuarios y papel tornasol, entre otros.
Fuente
esfácilsisabescomoes
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